1906: KANT Y NIETZSCHE SE TOMAN UNA CERVEZA EN UNA ESCALERA.

 

"Bienvenidos a "La Escalera" una prueba para tomar consciencia de lo difícil que es tener pensamiento propio y salir del rebaño"  Tener pensamiento propio, o casi idénticamente a como lo formuló Kant: ¡Sapere aude! ,atrévete a pensar por ti mismo. Y también "salir del rebaño" que podemos brevemente resumir en esa sentencia del Zaratustra de Nietzsche que dice: "Dios ha muerto: ahora nosotros queremos - que viva el superhombre" que es lo opuesto al Estado o incluso a la democracia, a la religión y hasta a la ciencia. En síntesis a cualquier valor compartido con otros humanos o que pretenda ser universal. 

    Nietzsche arrasa con todo aquello sospechoso de comunidad, pero Kant, ¿quizá por una influencia religiosa de la que no pudo liberarse? reivindica lo anterior como necesario, las expresiones máximas, aún hoy, de lo común. ¿Estamos ante una disyuntiva? ¿Una voluntad exclusiva de querer/poder o una voluntad racional? ¿Estar abierto a lo social es espiritualmente construirse solo?

Pongamos un contexto a cada uno de nuestros autores, pues sin duda nos dará alguna pista.  En su caso funciona la coherencia intelectual entre sus ideas y su vida, lo que no podemos decir de todos los filósofos.

    Kant pasa por ser en filosofía el gran condensador de los ideales ilustrados, como acabamos de ver. Pero Nietzsche reniega de él. El primero vivió una vida más o menos conforme a sus ideas a pesar de las turbulencias de la época  y de la sangre que corrió debido a diferentes guerras y a la Revolución francesa. De hecho buena parte de su obra política persigue la "paz perpetua" e incluso teoriza sobre organismos internacionales que podrían ayudar a conseguirla. Se puede decir de su vida que también fue de calidad, a pesar de que no lo tuvo fácil, debido a la temprana muerte de su padre y tener otros ocho hermanos. Sin embargo fue una vida rutinaria, aunque voluntariamente escogida y por ello probablemente feliz.

 La vida de Nietzsche sin embargo es bastante diferente. Hijo de un pastor protestante lleva una vida más o menos acomodada pero en seguida se revuelve contra su educación religiosa. Su vida pronto se convierte en difícil de vivir por diferentes desencuentros y frustraciones; con una mujer, Salomé, con algunos de sus inspiradores, Wagner y sobre todo con un cuerpo que no deja de torturarle. Desde muy joven sufre dolores de cabeza acabando sus días absolutamente dependiente e inconsciente, al cuidado de una hermana que trató de manipularlo intelectualmente. Y sin embargo, a tenor de una de sus más conocidas sentencias a la que ya nos hemos referido: "Era esto la vida. Que vuelva otra vez." Fijaos en la diferencia con este spot en el que nadie sube peldaños cuando la condición es no arrepentirse de nada.

    Ya al principio del anuncio se manifiesta la gran confusión, o deberíamos decir el gran conflicto, que encierra "pensar por sí mismo". Se pregunta: "¿Somos una sociedad que piensa por sí misma o nos dejamos llevar por la mayoría?  Evidentemente con sociedad se refiere a cada uno de nosotros, pero englobar a todos en la sociedad introduce una paradoja: sociedad viene de social y eso nos lleva a lo común, a lo que nos une... De hecho una de las protagonistas se sorprende porque alguien ha subido peldaños cuando se ha preguntado si piensan que no están influenciados por la mayoría. Su respuesta, constatada desde la Grecia clásica e inmensamente consensuada en la actualidad, incide en que somos seres sociales y por tanto hemos de estar luchando constantemente con la influencia de los demás. 

En seguida se insiste en uno de los polos: "Cuanto más pienses por ti mismo, más alto llegarás."  ¿Se refiere solo a la escalera?  Diría que la respuesta está a continuación cuando matiza: "Aquí no hay ganadores ni perdedores, ¿entendido?. 

Pausemos el anuncio por el momento, porque el problema está planteado. Pensar por sí mismo tiende a identificarse con el éxito y el progreso social; ascender por la escalera de la vida, ser un triunfador, alcanzar el poder social y si es el caso el éxito político.  Dejándonos llevar por una pendiente resbaladiza, lo reconozco, nos acerca a otros modelos de éxito como el del emprendedor, el hombre que se hace a sí mismo...aunque en realidad se confunda con explotarse a sí mismo, que viene a decir Byung-Chul Han...

Si esto es así, la autonomía moral kantiana, radicalizada por el superhombre de Nietzsche habría degenerado hasta volverse irreconocible. Determinado tipo de líderes actuales, de lo social a lo político, pasando por lo económico, se pueden sentir representados parcialmente por sus ideales.  Encaja con su filosofía la fuerza de voluntad y de poder, independencia, pero no otras que pretenden algunos de quienes las encarnan; esos que se arrepienten cuando las cosas vienen mal dadas o aquellos que no reconocen una derrota o agitan a los otros y los manipulan en beneficio propio cuando pierden...

Pensar por sí mismo, sea a la manera de  Kant o la de Nietzsche, no implica ni mucho menos ganar, alcanzar el éxito, ser popular. Estadísticamente, de forma abrumadora suele desembocar en lo contrario. Y claro, eso no es fácil. Querer volver a vivir una vida también con sus sinsabores, Nietzsche, no es para todos los paladares; eso sí es fortaleza, voluntad de poder. 

Pensar por sí mismo tampoco justifica comportarse como un déspota, imponer mi voluntad y no reconocer lo evidente, pero sí que significa debilidad, pensamiento heterónomo(dejarse llevar por otros) seguir a pies juntillas una voluntad ajena simplemente porque parece poderosa. ¿Estoy siendo demasiado metafórico? ¿Demasiado abstracto?

Alan Moore, un escritor de cómics, autor entre otros del fantástico "Watchmen", es decir, un creador de superhéroes, lleva tiempo arrepintiéndose de haber contribuido a la infantilización de la sociedad porque lo considera un "precursor del fascismo".  ¿Se me ve venir ya? Pongo nombres, seguro que muy reconocibles, recurrentes últimamente (es lo que toca) Más Iniestas y menos "Ronaldos"; más "Nadals" y menos "Djkovics", tolerables mientras se muevan en el deporte. Pero desde luego, en política, menos "Bolsonaros",  "Trumps", "Kim Jong-Uns", "Erdogans", "Boris", "Putins", "Maduros", "Xi Jinpings"... seguid la lista, también en la política doméstica, que estamos a las puertas. Y más...más... bueno reconozco que aquí tengo un problema para rellenar el hueco...Cualquiera que se ajuste al concepto de "Ejemplaridad pública" del filósofo español Javier Gomá. Y en economía ojo con otros bienhechores, Musk, Bezos...Personalmente, por supuesto no hablo por todos, no quiero que me salvéis ni siquiera de mí mismo.  En definitiva, más héroes anónimos y menos pretenciosos "superhéroes". 

    Vuelvo con el anuncio; contra él. Quizá a veces hay que callar para no confrontar; quizá educar no es solo desaprender; quizá a veces se esté a gusto en el rebaño. No todos sois genios ni líderes decentes, aunque cada uno penséis que lo sois. Y hay vida más allá. El aburrido de Kant fue probablemente un tío bastante satisfecho y hoy diríamos autorrealizado; sin alzar la voz ha contribuido a cambiar el mundo, para mejor, en mi modesta opinión. Nietzsche alzó mucho la voz y también lo ha cambiado, también para bien; seguro que también autorrealizado... a su manera, aunque a costa de mucho sufrimiento. 

Si sois de los de alzar la voz tened en cuenta que triunfadores estadísticamente hay muy pocos; muchos solo lo han sido después de muertos. ¿Estáis preparados para una vida genial, Nietzscheana?  Seguro que estáis preparados para la lucha, pero preparaos para lo que es mucho más probable, el sufrimiento y el fracaso. ¿Tenéis, con perdón, los "cojones" de Nietzsche? Si no es el caso, no pasa nada; siempre queda Kant, a mucha honra, aunque no tengamos ya el salvavidas de la religión para aferrarnos. 

POSDATA: Permitidme la licencia y el consejo.

 Si quieres un poco de claridad, lleva tu cuerpo al límite, ¡corre!, por ejemplo (no todo ha de ser fútbol). No es una metáfora, es autoayuda de la buena. Buscar tus límites, sin caer en la autodestrucción, te ayudará a saber quién eres, de qué pasta estás hecho; si te dejas llevar o no, paso previo y necesario a pensar por ti mismo. Un saludo a los esforzados de la vida del Cross de Cabrerizos en su treinta aniversario,👌 "una inmensa minoría que piensa por sí misma". Frío, lluvia, barro, empinadas cuestas, hasta cinco veces durante el duro invierno salmantino; correr hasta dónde puedas,  simplemente porque quieres, porque lo has decidido, con otros, seas quién seas, que no dejarán por el camino...